Pasaron pocos meses de la elección en Estados Unidos, que tuvo a AMLO como uno de los últimos líderes extranjeros en reconocer la victoria de Joe Biden. Ahora el Presidente de México conversará en una "cumbre digital" con su homólogo estadounidense para discutir una amplia gama de temas, incluida la inmigración y la seguridad.

En un comunicado previo al evento, la Casa Blanca dijo que los dos líderes discutirán la cooperación en materia de migración, los esfuerzos conjuntos de desarrollo en México y Centroamérica, la recuperación del Covid-19 y la cooperación económica. Todos temas complejos, y con un historial de eventos espinosos para el vínculo bilateral.

La reunión se produce inmediatamente después de que AMLO no felicitó rápidamente a Biden por su victoria electoral, pero también tras algunas medidas adoptadas en México que preocupan en la Casa Blanca, como la reforma que restringen la cooperación en materia de seguridad con EEUU tras el controvertido arresto del exministro de Defensa mexicano, general Salvador Cienfuegos Zepeda.

También los cambios jurídicos en materia de generación eléctrica, un tema que ya fue abordado por el Secretario de Estado Antony Blinken, en la conversación que mantuvo el viernes pasado con el Canciller Marcelo Ebrard.

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El ex embajador de México en Estados Unidos, Gerónimo Gutiérrez, quien actualmente es miembro de la junta asesora del Instituto de México y socio gerente de Beel Infrastructure Partners dijo que la perspectiva de un "choque" entre los dos hombres probablemente no se materializará nunca.

AMLO ya tuvo una breve plática telefónica con Joe Biden a finales de enero.

"La relación es muy importante para ambas partes. Pero hay claras diferencias y desafíos por delante: políticas energéticas en México, cambio climático y el papel de los combustibles fósiles frente a las energías renovables, un clima empresarial en deterioro en México, cooperación en materia de seguridad y aplicación de la ley y un enfoque realista pero basado en principios de la inmigración ", dijo Gutiérrez a LPO.

Gutiérrez agregó que "simplemente evitar un conflicto es un objetivo muy limitado para una relación tan importante, especialmente considerando el contexto geopolítico actual y la necesidad de México de reactivar la economía".

Además, antes de la reunión, la Casa Blanca dijo que la seguridad jugaría un papel destacado en la discusión, y que Estados Unidos y México coincidieron en "la importancia de trabajar juntos contra la amenaza común que representa el crimen transnacional".

Hay claras diferencias por delante: política energética, un clima empresarial en deterioro en México y cooperación en materia de seguridad.

A través de la Iniciativa Mérida, Estados Unidos ha destinado de más de USD 3,200 millones en equipos, capacitación y desarrollo de capacidades entre 2008 y 2020.

"A pesar de la tensión derivada del asunto de Cienfuegos, la cooperación en seguridad sigue siendo esencial si deseamos abordar el abuso y la sobredosis de drogas, la corrupción y el crimen organizado que impactan a ambas naciones", dijo Andrew Rudman, Director del Wilson Center en México Institute.

Antony Blinken, Secretario de Estado de EEUU.

"La migración, que se ve afectada por el crimen organizado, también exige un enfoque conjunto para abordar a los conductores, que ambos líderes han destacado, y para atender adecuadamente a quienes esperan audiencias de inmigración en Estados Unidos", agregó Rudman.

En el aspecto comercial, se esperaba que Biden y López Obrador abordaran una serie de cuestiones comerciales pendientes, incluida la implementación del Acuerdo Estados Unidos-México-Canadá (USMCA).

"Tengo la esperanza de que se pueda hacer un anuncio en una Cumbre de Líderes de América del Norte para que estos y otros temas puedan abordarse desde una perspectiva de América del Norte, además de bilateralmente", dijo Rudman.

AMLO sobre la situación migratoria: "Es falso que ya están abiertas las puertas de Estados Unidos"

Arturo Sarukhan, quien se desempeñó como embajador de México en Estados Unidos entre 2007 y 2013, dijo que más allá de los detalles de la agenda de la reunión, la discusión "evidenciará uno de los desafíos más importantes para la relación en el futuro".

"Como político que se inició en el México de los setenta y ochenta, AMLO simplemente no comprende cómo evolucionó la relación entre Estados Unidos y México", dijo.

La migración, que se ve afectada por el crimen organizado, también exige un enfoque conjunto para abordar y para atender adecuadamente a quienes esperan audiencias de inmigración en Estados Unidos.

Y agregó: "No existe una relación con temas independientes para cuestiones de política exterior nacional y bilateral. Están entrelazados, en lo que comencé a etiquetar como una agenda 'interméstica'durante mi mandato como Embajador ".

Sarukhan agregó, sin embargo, que la relación entre los dos países puede verse tensa a largo plazo como resultado de las preocupaciones de AMLO: "Si a esas complejidades se le suma su obsesión con la soberanía como una forma de frustrar lo que él percibe como una intromisión extranjera, las sinergias transfronterizas necesarias serán extremadamente difíciles de abordar de manera conjunta.

Antes de la reunión, López Obrador dijo que tiene la intención de proponer un programa de trabajo para inmigrantes al estilo "Bracero" que podría traer de 600.000 a 800.000 inmigrantes mexicanos y centroamericanos al año para trabajar legalmente en Estados Unidos.

Sin embargo, los altos funcionarios de la administración de Biden se han negado a decir si Estados Unidos apoyaría el plan y, en cambio, han dicho que Estados Unidos y México acuerdan mutuamente la necesidad de ampliar las vías legales para la inmigración a Estados Unidos.